Hidden Gems en Nueva York: esos rincones que te hacen sentir local (y no turista)

Si hay una ciudad que siempre tiene algo nuevo para mostrarte, es Nueva York. Pero, más allá de las postales clásicas, la verdadera magia está en esos rincones escondidos, esos lugares que no aparecen en cada guía y que te hacen sentir que descubriste un secreto. Hoy te comparto algunas de mis hidden gems favoritas, perfectas para sumar a tu próximo viaje (o para volver y ver NY con nuevos ojos).

1. El jardín escondido del Rockefeller Center Sí, el Rockefeller lo conoce todo el mundo, pero casi nadie sabe que arriba del edificio hay un pequeño jardín colgante, el Channel Gardens Roof Terrace. Es un oasis en medio del caos de Midtown y es gratis. Ideal para un respiro entre compras y visitas.
2.  Albertine Books: un rincón literario parisino Dentro de la histórica embajada de Francia, esta librería es un sueño para amantes de los libros. Con un techo pintado lleno de constelaciones y una selección increíble de títulos en francés e inglés, es uno de esos lugares donde podés perder la noción del tiempo. Además, está cerquita de Central Park, así que es el combo perfecto.
   
3. Tiny’s & The Bar Upstairs En Tribeca, escondido entre edificios modernos, está Tiny’s, un restaurante/bar dentro de una casita rosa de 1810. La comida es deliciosa (recomiendo el brunch) y el ambiente es ese equilibrio perfecto entre sofisticado y acogedor. De esos lugares que parecen secretos, aunque estén en pleno Manhattan. 
4. Pier 54 - Little Island Este parque flotante sobre el Hudson es relativamente nuevo, y aunque ya empieza a aparecer en algunas guías, sigue teniendo ese aire de descubrimiento. Lo mejor es ir al atardecer y ver cómo el sol cae sobre el río, con una copa de vino en la mano. Y si enganchás un show en el anfiteatro, todavía mejor.
   
5. Apotheke Chinatown Si te gustan los bares con historia, este es para vos. En una callecita perdida de Chinatown, detrás de una puerta sin cartel, está Apotheke, un speakeasy inspirado en una antigua farmacia. Los tragos son de otro mundo y la experiencia de encontrarlo es parte de la magia.

¿Por qué me encanta buscar hidden gems? Porque viajar no es solo tachar lugares de una lista, es sentir que te apropiás un poco de cada destino, como si fuera tuyo por un rato. Y Nueva York es una ciudad que nunca se termina, siempre tiene una puerta secreta más para abrir.

Si querés que te arme un itinerario con tus propios hidden gems (pensados según tus gustos), ya sabés: escribime y lo armamos junt@s.